Nuestro sitio web utiliza cookies para mejorar y personalizar su experiencia y para mostrar anuncios (si los hay). Nuestro sitio web también puede incluir cookies de terceros como Google Adsense, Google Analytics, Youtube. Al usar el sitio web, usted consiente el uso de cookies. Hemos actualizado nuestra Política de Privacidad. Por favor, haga clic en el botón para consultar nuestra Política de Privacidad.

Argentina muestra su peligro ante un nuevo desafío en el Rugby Championship

https://a1.espncdn.com/combiner/i?img=photo20240706r1355349_1296x729_169.jpg

La selección argentina de rugby se prepara para una nueva edición del Rugby Championship con la determinación de afianzar su papel como rival de peso frente a las potencias del hemisferio sur. El crecimiento del equipo en los últimos años es evidente: en sus primeras diez temporadas en el torneo, el conjunto sumó apenas seis victorias; sin embargo, en las tres más recientes ha igualado esa cifra, logrando triunfos que marcan un antes y un después para el rugby nacional.

Entre esos resultados históricos figuran una victoria en Nueva Zelanda, otra sobre Sudáfrica —campeón mundial vigente— y un contundente 67-27 ante Australia, que evidenció no solo la capacidad ofensiva del equipo, sino también su solidez táctica. Estos hitos han transformado a Los Pumas de ser vistos como un participante emergente a ser considerados un contrincante peligroso para cualquiera.

Felipe Contepomi, seleccionador nacional, encara el torneo con una plantilla reforzada. Tras una serie de encuentros ante Inglaterra en los que se ausentaron varios nombres clave, regresan jugadores fundamentales como Juan Cruz Mallía, Santiago Chocobares, Marcos Kremer, Bautista Delguy, Mateo Carreras e Ignacio Ruiz. También se reincorporan Tomás Albornoz, Gonzalo García, Franco Molina y Joel Sclavi, quienes brillaron recientemente frente a los British & Irish Lions. Esta mezcla de experiencia y juventud proporciona al equipo un equilibrio que será vital para afrontar compromisos de alto nivel.

Marcos Kremer, uno de los líderes del equipo, destaca que los avances recientes han fortalecido la mentalidad del grupo. De acuerdo con el jugador, el reto reside en superar la ansiedad y enfocarse en el juego, confiando en las habilidades que el equipo ha mostrado. Para Kremer, el desempeño del pack será crucial para liberar el potencial ofensivo de los backs y así establecer diferencias frente a rivales de alto nivel.

El cronograma del torneo tiene desafíos significativos. Argentina iniciará su participación con dos partidos en casa contra Nueva Zelanda, un oponente al que ya logró derrotar como visitante, pero al que no ha logrado vencer en territorio argentino en más de cuarenta años. Después, se desplazará a Australia y más tarde a Sudáfrica para enfrentar a los Springboks en Durban. El cierre será único: un encuentro en Londres el 4 de octubre, marcando el primero del Rugby Championship que se juegue en el hemisferio norte.

Dentro del contexto del campeonato, esta versión del torneo posee un valor estratégico añadido: es un momento crucial en la preparación para la Copa del Mundo de Rugby 2027. La competición permitirá afinar al equipo, mejorar las tácticas de juego y evaluar fuerzas contra los oponentes más desafiantes.

La selección argentina llega a esta cita con un perfil distinto al de años anteriores. La combinación de resultados recientes, el regreso de figuras clave y una base de jugadores con experiencia en grandes escenarios otorgan al equipo un estatus renovado. Aunque el respeto ganado en el campo ya es evidente, el objetivo ahora es dar un paso más y transformar esa consideración en temor real para los rivales.

Con la mira puesta en la consolidación, Los Pumas buscarán no solo sumar victorias, sino también seguir construyendo una identidad competitiva que les permita llegar a 2027 como una de las selecciones más completas y respetadas del panorama internacional.

Por Otilia Adame Luevano

También te puede gustar